El corregimiento de las diecisiete villas (fotografía: Jesús Pinedo)


Imagen del poder municipal

Imagen del poder municipal
EL CORREGIMIENTO DE LAS DIECISIETE VILLAS EN LA EDAD MODERNA (foto: Jesús Pinedo)

viernes, 12 de febrero de 2016

Un concejo "abierto" en Motilla del Palancar en 1572

... en la dicha villa de la motilla doze días del dicho mes de otubre del dicho año (1572) estando en ayuntamiento en el portal de la sala de la dicha villa los muy magníficos señores martín garçía e jorje de los panos alcaldes hordinarios y alonso de mondexar e alonso lucas rregidores para dar cumplimiento a lo que su magestad manda y el señor gobernador en su nombre mandaron apregonar y se apregonó por boz e pregón público que se quería hazer conçejo abierto para cosas complideras al serviçio de su magestad que todos los vecinos que quisisesen venir a se hallar presentes en el dicho ayuntamiento que vynesen luego e demás desto fizieron llamar y llamaron a çiertos vecinos desta villa de los prinçipales della y de los que fueron llamados y de los que vinieron por rrazón del dicho pregón se juntaron en el dicho ayuntamiento con los dichos señores alcaldes y rregidores alonso de córdoba el viejo e alonso de la xara navarro e juan de la xara navarro e juan toledo e julián martínez y benito garçía de monteagudo e matías navarro y esteban garçía e gil salvador e miguel de la casa el viejo e martín de la casa e juan apariçio e françisco lópez de hernán lópez y christóval de apariçio e françisco escriuano e gabriel tendero e benito garçia del peral e martín de la torre e bartolomé núñez e diego gómez  e benito de la xara e martín lópez e antón de utiel e hernando de las heras e manuel martínez y blas navarro e alonso de la casa y tomás tendero y christóval martínez y pasqual de valverde e juan navarro e alonso garçía de hernán garçía e miguel de valverde rrubio e diego de la parrilla e juan lópez veçinos desta villa y estando ansy todos juntos se leyó la dicha rreal çédula y los señores alcaldes e rregidores dieron a entender lo que su magestad es servido y manda que se ynstituya cofadría debajo del nombre de algún santo para el hefeto de lo contenido en la dicha rreal çédula y qué veçinos podían comprar y vender cavallos y armas y con qué se les podía ayudar e favoreçer para ayudar a sustentar los y para hazer fiestas de los propios del conçejo y qué dehesas se podían hazer para el dicho hefeto y qué hordenanças a de aver para ello e aviéndose todo platicado y conferido unos con otros sobre el dicho caso vinieron a rresumirse ansy los veçinos veçinos que fueron llamados que de suso quedan declarados como los dichos ofiçiales del conçejo en dezcir e dixeron que en esta villa no ay cavalleros ni hijosdalgo y que tienen conoçidos los veçinos desta villa que son todos labradores y no son acostumbrados a tener cavallos ni usardel ofiçio militar demás están muy pobres gastados y neçesitados de causa de lo que se gasto en la guerra del rreyno de  granada y por la esterilidad que a avido de frutos en los años pasados y ansí tienen por çierto que no ay quien pueda comprar cavallos ny armas y el dicho conçejo desta villa es pobre y de muy pocos propios de tal manera que podrá hazer muy poca ayuda y el término desta villa es angosto y pequeño de tal manera que no ay en él donde se puedan fazer dehesas aunque les pareçe por lo que su magestad manda es cosa justa y que conviene a su rreal serviçio que aya gente de cavallo en los pueblos en los pueblos y convenya mucho demás de la abtoridad rreal a la onor de la rrepública y veçinos della pero que si su magestad de otra cosa fuere servido harán todo aquello que pudieren y más en servicio de su magestad cada que les fuere mandado e ansy lo dixeron e firmaron los señores alcaldes e rregidores y los que demás sabían, martín garçia jorje de los panos alonso de mondéjar alonso lucas alonso de córdova alonso de la xara juan de la xara estevan garçía miguel de la casa benito de la xara manuel martínez alonso de la casa pasqual de valverde alonso garçía diego de la parrilla antón de utiel matías de la casa thomás tendero françisco lópez françisco escriuano martín de la torre Bartolomé martínez diego gómez  alonso de la casa juan navarro fui presente alonso de córdova escriuano e yo el sobredicho alonso de córdova escriuano por aprovaçión de su magestad y del número y del ayuntamiento desta villa que a lo que dicho es presente fui y pasó ante mí y queda a el tanto en mi poder en testimonio de verdad fize aquí este mi sygno

(signo)                                              alonso de córdova  (rúbrica)


AGS, CC-Diversos de Castilla, libro 25, fol. 1. Expediente sobre formación de cofradías de 1572

jueves, 11 de febrero de 2016

Un concejo "abierto" en Quintanar del Marquesado en 1572


                                                            (cruz)

Tomás López: Diccionario Geográfico de España
                                               
la villa de Quintanar                                                                       sobre el arte militar

En la villa de Quintanar del Marquesado de Villena a honze días del mes de otubre de mill e quinientos y setenta e dos años este día se juntaron en su ayuntamiento segund que lo han de costumbre de se juntar los muy magníficos señores ginés lópez e miguel sayz talaya alcaldes ordinarios en la dicha villa por su magestad e alonso garçía tabarnero e juan donate e françisco donate e marco martínez e antón martínez rregidores eugenio lópez alguazil mayor de la dicha villa todos oficiales del dicho conçejo para tratar e conferir en cumplimiento de una çedula rreal de su magestad e mandamiento del ilustrísimo señor liçençiado martínez de santotis gobernador deste marquesado sobre la orden e forma que se terná para que los cavalleros e nobles estén vsados y exerçitados en las armas y arte militar e para este efeto mandaron llamar ayuntamiento abierto y espeçialmente entraron en el dicho ayuntamiento juntamente con los dichos señores martín cabronero e alonso martínez el moço e alonso martínez el viejo martín donate pedro de rruypérez e ansy juntos se mostró la dicha çédula rreal que sobre lo ssusodicho habla y habiéndolo visto y entendido platicaron e confirieron sobre lo en ella contenido muy particular e todos de una voluntad y acuerdo dixeron que en esta villa no ay cavalleros ni hidalgos ni personas tan abonadas ni desocupados que puedan exerçitarse en el arte militar ni tengan ni armas ni caballos para ello porque todos son labradores e ocupados en sus haçiendas muy nezesitados por la esterilidad de los tiempos  y desencavalgados porque an servido a su magestad con sus bagages en la guerra de granada donde se les consumieron e los dichos señores por sí y en nombre desta villa protestaron que en su arte condiçión e calidad con sus bienes e personas servirán a su magestad por la suerte e calidad que su magestad se quisyere servir dellos como tienen su obligaçión como sus leales y esto dieron por su respuesta y lo fermaron los que supieron con acuerdo de su asesor miguel sayz talaya alonso garçía juan donate antón martínez françisco donate marco martínez pedro de rruypérez alonso martínez martín cabronero alonso martínez eugenio lópez ante mí juan de garay escriuano e yo el dicho juan de garay escriuano de su magestad e público de la dicha villa e del ayuntamiento della que a la dicha respuesta presente fuy en vno con los dichos señores justiçias regimiento y los demás que dicho es e por ende fize este myo signo a tal en testimonio de verdad  juan de garay escribano (rúbrica) 

AGS, CC-Diversos de Castilla, libro 25, fol. 1. Expediente sobre formación de cofradías de 1572

Imagen. BNE. MSS.MICRO/14485

Fundación del Convento de Carmelitas Descalzas de Villanueva de la Jara (1580)


                 CAPITULO XII

Parte la Venerable Madre Ana en compañía de N. S. M. Teresa de Iesús a la fundación de Villanueua y sucesos del camino


Muy consolada se hallaua nuestra Santa Madre  en Malagón, por ver que en aquel espiritual Paraíso, que ella auía plantado, cogía Dios tan gustosos frutos de virtudes, y deseosa de trasplantar a otras partes tan fecundas plantas, estaua disponiendo en su ánimo las fundaciones de otros conventos. Auianle pedido en Villanueua de la Iara, fuesse a aquella villa a fundar uno por instancias de nueue personas virtuosas, que en trage de Beatas viuían juntas en una misma casa con grandes exercicios de virtud; y deseosas de darle forma de Conuento, instauan a Santa Teresa, que las recibiesse debaxo de su obediencia, y disciplina, y fuesse allí a fundar. Las conuenencias, y medios, que para este efecto se le ofrecían, eran muy pocas, y pesándolas con su mucha prudencia, le pareció no ser conveniente empeñarse en fundación, que no auía de poder perseuerar y así estaua algo remissa, ó por mejor dezir, determinada a no admitit esta fundación, sino ir a Llerena, a donde le ofrecían otra, y dauan para ella seiscientos ducados de renta. Con este ánimo  estaua la Santa, quando vino un propio segunda vez a Villanueua de la Iara, pidiéndole con más apretadas instancias la Villa, que fuesse. Y sintiendo en sí las mismas dificultades, que en este punto tuuo, lo encomendó a Nuestro Señor, y apareciéndosele la dixo: Hija, con pobres fundé yo mi Iglesia. Estas palabras, y el manifestarle su voluntad, la reduxeron que a toda priessa partiesse de Malagón para Villanueua de la Iara, aunque al presente se hallaua en la cama con perlesía y otros achaques penosos. Pero como ninguno en ella era impedimento para cumplir la voluntad de Dios, dispuso desde luego la jornada, señalando su diuina Magestad las Religiosas, que auía de lleuar consigo; y entre ellas, en primer lugar, a la Venerable Madre Ana de San Agustín, como ya se dixo. Salieron, pues, de Malagón con Nuestra Madre Santa Teresa, la Venerable Madre Ana de San Bartolomé, María de los Mártires, Constança de la Cruz, Elvira de San Angelo y Beatriz de Iesús. Luego que salieron de casa, se halló la Santa buena de todos sus males. Y así se aliuiaron sus hijas de la pena con que iban a verla tan mala. Experimentaron en el camino muy particulares prouidencias. Una noche después de auer pasado un día muy penoso, llegaron a un lugarcillo pequeño, hospedaronlas lo mejor que fue posible, y estando la Santa recogida, y con ella en una misma pieza la Venerable Madre Ana de San Agustín, y Ana de San Bartolomé, su secretaria, empeçaron a oír una música celestial, que mucha multitud de Ángeles, que estauan en  el aposento dauan a las esposas de el Cordero. El mote de la música, y lo que contenía la letra, eran agradecimientos de parte de Dios, por el seruicio que le hazían en aquella fundación. Era tanta la dulçura, y la suauidad de esta música, que con durar grande parte de la noche, les pareció auía durado sólo un instante, sintiendo en sus coraçones, y particularmente nuestra Venerable Madre Ana de San Bartolomé para hazerla participante de aquel fauor de el cielo, y entrambas con igual agradecimiento lo estuuieron escuchando.

Saliendo el día siguiente de este lugar, llegaron al Conuento del Socorro, que era de Religiosos de la Órden adonde la prodigiosa virgen Catalina de Cordoua auía hecho vida tan penitente y rara, que pudo competir con la de S, María Egipciaca, y a otras santas, que fueron en admiración de los desiertos. Aquí fueron recibidas la Santa Madre, y sus hijas con toda estimación y cariño de religiosos de aquella Casa, saliéndolas a recibir en procesión con notable gozo. Grande le tuuo la Santa Reformadora en ver la vida Santísima, y penitente  que en aquel Conuento hazían sus religiosos. Detúuose en aquel sitio dos días para aferuoriçarlos con su enseñança; y uno dellos, acabando de comulgar, y estando con ella la Venerable Madre Ana, se quedó arrobada, echando de su rostro resplandores las luzes que en su alma ardían. Buelta del arrebatamiento, le dixo a la Venerable Madre, como a quien más fiaua sus secretos, lo que nuestro señor auía dado a entender en aquel arrobamiento; y entre otras casas, fue una a dezirle, que se auía de seruir mucho Su Magestad en aquella Casa que iban a fundar a Villanueua.

Partieron de aquí para esta villa, y los religiosos del Socorro les dieron algunas pobres alhajas de lo poco que tenían para componer el nueuo Monasterio. Dieronles también alguna ropa de Sacristía, y Ornamentos, y entre ellos a un Niño Iesús pequeñito para que les hiziesse compañía, el qual después hizo muchos milagros, y finezas con la Venerable Madre Ana, como adelante se dirá. Llegaron este día temprano a Villanueua, y se fueron derechas la Santa Madre, y sus hijas a la Iglesia Mayor de la Villa, adonde se pusieron en Oración, estando en ella como unos Serafines ardiendo en el amor de Dios. Concurrió la mayor parte del Lugar a la nouedad, y todos quedauan admirados de la Santidad, que en sus acciones mostrauan. Tenían dispuesta una solemne Procesión para lleuarlas a su casa desde la Iglesia, y en ella lleuauan el Santísimo Sacramento en sus andas, como suele hazerse en aquel lugar, quando se celebra la Fiesta. Començando a andar la Procesión, le hizo nuestro Señor un fauor singular a la Venerable Madre Ana, y fue ver al Niño Jesús, que iba entre las andas del Santísimo Sacramento, y entre nuestra Santa Madre andando, y se llegaua hasta su querida Esposa, y le hablaua mostrando el Santísimo Niño grande hermosura, y alegría en su diuino rostro; y que leuantando su mano iba hechando la bendición a las Religiosas, y al pueblo, que tan afectuoso las acompañaua. Admiróse del caso la Venerable Madre Ana, y llegándose a su Santa Madre le dixo lo que le pasaua. A lo qual la Santa le respondió: Yo os mando en virtud de Santa Obediencia, no digáis nada a nadie de esto, que aquí pasa, La sierua de Dios, como tan obediente lo calló, y fue prosiguiendo en gozar de aquella tan apacible vista, absorta en la contemplación de la bondad de aquel diuino Señor, que tantas demostraciones haze por quien de veras le sirue. Auiendo llegado a la pobre capilla, a donde se hauía de fundar el Monasterio, colocaron el Santísimo Sacramento. Despidióse la gente, y la Santa con las religiosas que lleuaua, y las nueue Beatas que allí viuían se quedó encerrada, estando todas aquella noche en oración, que era el principal sustento de que se alimentauan, dando Su Magestad muchas gracias por el beneficio recibido; y pidiendo por la conseruación, y aumento de aquella Casa, que por voluntad suya auía fundado.


BIBLIOTECA DE CASTILLA Y LEÓN. Signatura: G-E 960. Vida, virtudes y milagros de ... Ana de San Agustin, Carmelita Descalza ... / por el M.R.P. Fr. Alonso de San Gerónimo, Carmelita Descalço ... Madrid, por Francisco Nieto, 1668, pp. 26-28
http://bibliotecadigital.jcyl.es/i18n/consulta/registro.cmd?id=4080

miércoles, 10 de febrero de 2016

Belmonte según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Era la villa de Belmonte un espeso monte de pinos y carrascas, con algunas casas que llamaron las Chozas, y adelantando sus posiciones le pusieron Bellomonte,  quedándose con sólo Belmonte cuando se hizo villa. Dista de Cuenca 12 leguas, estando respecto de ella entre S.O., situada parte en un llano y parte en dos cerros y cañadas. Fue aldea de Alarcón, y en el día 8 de julio del año de 1399 en la ciudad de Sevilla expidió Real privilegio el rey Don Pedro el Justiciero dándosela a la Serenísima Señora Doña Blanca, nieta del Serenísimo Señor Infante Don Manuel, á fin de que este pueblo se hiciese villa de por sí y sobre sí, con jurisdicción por sí y sobre sí, con jurisdicción civil y criminal, alta y baja, de mero y mixto imperio, con corregidor y otras gracias. No puede dudarse fué fundación antigua, pues hay privilegios del tiempo del rey Don Alfonso X. Hecha villa la dieron por sus términos y aldeas á Monreal, el barrio de los Hinojosos, la Osa de la Vega, Tresjuncos y Hontanaya. Fué vicaría perpetua. El privilegio de villa se transfirió después de la Serenísima Señora Doña Blanca de Castilla, con otros privilegios reales, a los Excelentísimos Señores Marqueses de Villena, como Señores de este pueblo, en cuya casa permanece desde tiempo del rey Don Enrique III. El IV de este nombre le dió otros privilegios que conserva la propia casa de Villena, y los confirmó en 30 de abril de 1642 el rey Don Felipe IV, y en 1709, en Madrid, Don Felipe V. Tiene dos ferias, una por San Miguel y otra por San Andrés: un castillo hecho por Don Juan Pacheco, Gran Maestre de Santiago, y otro había antiguamente en el cerro que llaman de San Antonio Abad. Su colegiata se compone de 4 Dignidades con Canongía anexa, 6 Canongías, 4 Raciones y 6 Capellanes de coro: hay cuatro conventos de religiosos y religiosas. Están sepultados en este pueblo diferentes sujetos distinguidos en santidad: fueron naturales de él, entre otros varios que no se nombran, Fray Luis de Montoya; el M. Fr. Pedro de Lorca, General del Órden de San Bernardo; el P. Gabriel Vázquez, de la extinguida Compañía, el M. Fr. Luis de León y su sobrino Fr. Basilio de León, ambos del Órden de San Agustín; diferentes religiosos que asistieron al Concilio de Trento y que fueron escritores; el P. Juan del Castillo, que murió mártir; Fr. Luis de Ávila, del Órden de San Agustín; Miguel Lucas Hiranzu, Condestable de Castilla, que murió desgraciadamente en Jaén el año de 1573; el licenciado Don Pedro Bedoya, &c. Tiene al presente 400 vecinos.


LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 199-201

martes, 9 de febrero de 2016

El Colegio de San Clemente Mártir o de los Manchegos de la Universidad de Alcalá de Henares.


El Colegio de San Clemente Mártir, también llamado Colegio de los Manchegos, de Alcalá de Henares, se situaba en la calle de la Justa, hoy de Santa Úrsula. El edificio que se mantiene en pie hoy en día, ha perdido su torreón.

Fue fundado por Sebastián Martínez de Tribaldos, capellán de honor de S. M. y prior de Roncesvalles, por testamento otorgado en Madrid el 7 de diciembre de 1620, que ejecutará su hermano y albacea Pedro Fernández de Tribaldos, jesuita, que redactó sus constituciones en 1631.  Previamente existía un colegio anterior fundado en 1589 por García Loaysa, antiguo estudiante de la Universidad de Alcalá y futuro arzobispo de Toledo. El 18 de enero de 1628 se había obtenido licencia del cardenal Zapata para decir misa en la capilla recientemente erigida

que en la casa que para este efecto tienen elegida an hecho una capilla con el adorno necesario para poder dezir misa

Inicialmente con la refundación en 1620 del doctor Tribaldos sólo tenía 6 becas para teólogos y canonistas, aunque se pretendía aumentar su número a 20. Eran preferidos como colegiales los del linaje de Tribaldos, pero dos de las becas se otorgaban a los naturales de la Mancha, obispado de Cuenca. En 1641 se le incorpora el colegio de San Lucas Evangelista o de Magnes, incorporación que será ratificada por el reformador García de Medrano y en 1759 se le agrega el de San Cosme y San Damián o de Mena, aunque como veremos en el documento anexo su unión ya se había intentado en 1698, siguiendo el modelo de fusión de otros colegios. El colegio tenía un total de 9 colegiaturas: 4 propias, 3 de Mena, 1 de San Lucas y 1 fundada por Pedro Díaz Mayorga para sus parientes por testamento de 9 de abril de 1674. Próximo este colegio al de Santa Catalina Mártir o de los Verdes, se le agrega a él con sus adscritos en 1781, tras la reforma del cancelario D. Pedro Díaz de Rojas. Previamente el colegio de los Verdes había absorbido al de Tuy en 1663 y al de los Vizcaínos en 1664.

Su fundador el Doctor Sebastián Fernández Tribaldos era vecino de San Clemente. Siendo en 1609 licenciado todavía obtendrá el nombramiento de capellán de su majestad y licencia para administrar sacramentos y decir misa en la Corte por facultad otorgada por el capellán mayor don Diego Guzmán. En 1610 se le otorgará una renta anual de 300 ducados sobre las rentas de la iglesia de Barcelona. Posteriormente obtendría el cargo de juez ordinario de dicha capilla real y prior de Roncesvalles, 15 de mayo de 1613. Confirmando su ascenso con el título capellán mayor del Cardenal Infante, 13 de agosto de 1620.

El licenciado Tribaldos procedía de una familia principal de San Clemente. Era hijo del regidor García de Haro y Andújar y de doña María Haro Tribaldos. La saga familiar continuaría en San Clemente de la mano de la hija, María Haro Tribaldos-Olivares, que casaría con el licenciado Mateo Lucas Fernández Alarcón, a quien vemos como alcalde ordinario hacia 1640. El hijo de este matrimonio, también llamado Mateo Lucas Fernández, sería patrón del Colegio de San Clemente, y su hermano Pedro Fernández Tribaldos canónigo de las Iglesia de los Santos Justo y Pastor, en la mencionada ciudad de Alcalá de Henares.

De la reserva de una parte de las becas conservadas a la familia Tribaldos dan fe las informaciones geneálogicas conservadas en el Archivo Histórico Nacional:
  • Información genealógica para admisión a beca en el Colegio San Clemente Mártir o de Manchegos de José de Haro Olivares Andujar Tribaldos, natural de San Clemente. 1638      (Signatura: AHN. UNIVERSIDADES, L. 390, Exp. 2)
  • Información genealógica para admisión a beca en el Colegio San Clemente Mártir o de Manchegos de Luis Tribaldos de Toledo Castejón, hijo de Luis, Cronista Mayor de Indias. 1629      (Signatura: AHN. UNIVERSIDADES, L. 390, Exp. 2)
  • Asiento en el libro de capillas del Colegio de San Clemente Mártir o de Manchegos correspondiente a María Haro-Tribaldos Olivares, esposa de Mateo Lucas Fernández Alarcón, vecinos de San Clemente, que oposita al patronato del Colegio. Información de ser hermana de Sebastián Fernández Tribaldos, e hijos de García Haro Andújar y de doña María Haro Tribaldos. 1650      (Signatura:  AHN. UNIVERSIDADES, L.975,Fol.169)      
  • Asiento en el libro de capillas del Colegio de San Clemente Mártir o de Manchegos correspondiente a Sebastián Fernández Tribaldos. 1632  (Signatura: AHN. UNIVERSIDADES, L.975, Fol.13)
  • Asiento en el libro de capillas del Colegio de San Clemente Mártir o de Manchegos correspondiente a Mateo Lucas Fernández Tribaldos, patrón del colegio de San Clemente. 1666 (Signatura: AHN. UNIVERSIDADES, L. 975,Fol. 310)             

Aunque la agregación del Colegio de San Cosme y San Damián o de Mena no se produce hasta 1759, hubo un intento de unión en 1698, pidiéndose informe al provisor del obispado, que debió ser desfavorable:

Pablo Sáez en nombre del Rector y collegiales del collegio de San Clemente Mártir de esa Universidad y del rector y collexiales del de Mena de ella nos hiço relación que por la esterilidad del tiempo las rentas de dichos collegios se hauían disminuido de forma que el de San Clemente lo más que podía mantener eran ocho collegiales y el de Mena tres o quatro sacando los gastos del Mayordomo y despenseros amas y criados de mancomún de que se originaban que ambos collegios tenían gran falta de exercicio en sus concursos y que no se hacían en la forma que deuieran hacerse y para remediar lo referido tenían tratado que dichos dos collegios se uniesen e yncorporasen en la conformidad que lo hauían echo otros como era el de los verdes en dicha universidad porque uniéndose compondrían una comunidad de doce o catorce collegiales de voto y quatro porcionistas en lo qual los exercicios serían más frequentes y la utilidad maior...





AHN. UNIVERSIDADES. 391, exp. 61. Mandamiento del provisor para que se haga información sobre la conveniencia de unir los colegios de los  Manchegos y el de Mena. 16 de mayo de 1698

domingo, 7 de febrero de 2016

Santa María del Campo según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Santa María del Campo Rus

La villa de Santa María del Campo tomó su denominación de una ermita antigua de Nuestra Señora de la Concepción, que había donde se halla hoy el convento de religiosos calzados de la Santísima Trinidad, muchos años ántes que hubiese casa ni población: por los años de 1460 se llamaba villa: el de 1564 era propia de Don Antonio de Castillo Portocarrero: se vendió segunda vez año de 1608 a Don Diego Fernández Ruiz de Alarcón, del Consejo de S. M., y hallase ahora por herencia en la casa del Excelentísimo Señor Duque de Granada de Ega, Conde de Xavier, con 490 vecinos: extramuros de la población, y muy inmediato á ella, está fundado, como se dijo, desde el año de 1564 el convento de la Trinidad, con privilegios del Rey Felipe II y del Señor Don Fr. Bernardo de Fresneda, Obispo de Cuenca. Se venera en esta iglesia la Imagen del Santo Christo del Buen temporal, dádiva de la Señora Doña Mariana de Austria, madre de Carlos II. Dista el pueblo de su capital Cuenca 10 leguas, rodeándole por los quatro vientos las villas de Honrrubia, Cañabate, San Clemente, la Alberca y el Pinarejo. Nace á la parte del norte un arroyuelo de aguas saladas, y corre por junto á la población al mediodía, uniéndose con el de San Clemente. Los sujetos naturales y más condecorados de esta villa son los Ilustrísimos Don Francisco de Alarcón, Obispo que fué de Pamplona; y Don Pedro Rubio Benedicto, de Mallorca; como asimismo el V. Fr. Andrés Rubio, religioso Trinitario. El año de 1782 se estableció en este pueblo de cuenta de la Real Hacienda la fábrica Real de salitres, que puede ser en lo succesivo de las mejores del reyno por su excelente cantidad y calidad.


LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 201-202

Alarcón según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Alarcón

La villa de Alarcón se mantuvo fiel y leal a sus Reyes en los tiempos más belicosos. Es antigua es fuerte por naturaleza y por arte; y esta situada al mediodía á 10 leguas de ella, y al oriente de la villa de San Clemente á 5 leguas. Hállase fundada sobre una peña tajada; la ciñen en forma de herradura las corrientes del río Xúcar, dicho por los Romanos Sucro, y los pueblos situados sobre sus márgenes Populi Sucronenses. Solo hay un camino por tierra firme para la entrada de dicha villa por la parte oriental, tan estrecho que sólo hay capacidad para el tránsito de un carruage. Las dos entradas una al Sur y otra al Norte, y para el paso del río Xúcar se hallan dos elevados  y antiquísimos puentes, construidos magníficamente de piedra de sillería. Por el lado del norte le usan los correos de Madrid para Valencia, en las temporadas de aguas abundantes, que debían usar constantemente para escusar atrasos. Esta villa tiene por armas desde su conquista un castillo de oro en campo roxo. Su vecindario en lo antiguo fué de 500 á 600 vecinos, y al presente se reduce a 300, incluyendo sus barrios de Balverdejo, Cañadajuncosa y Cañadancha.

Dicen que fué fundación de Celtíberos, y que la ganó á los Romanos un hijo de Alarico Rey Godo de España; y contento de su ameno sitio la pobló, nombrándola Alaricón en memoria de su padre: con el tiempo, perdiendo la i, quedó Alarcón. Posteriormente conquistaron esta villa los Sarracenos, y quedó sujeta a Ben Habet, Rey moro de Sevilla; y habiendo casado de terceras nupcias Alfonso VI, con su hija Zayda, se bautizó y se llamó Doña María: fue muy buena christiana, y de ella tuvo el Rey Don Alfonso al Príncipe Don Sancho, que murió desgraciadamente al tiro de una flecha en las inmediaciones de Uclés. Últimamente reconquistron a Alarcón los Moros, y el Rey Don Alfonso IX la volvió a conquistar año de 1177, día de San Andrés, mandádola reedificar y habitar a nobles Extremeños, siendo caudillo de esta expugnación el famoso Fernán Martínez de Ceballos, Rico Hombre de Castilla y Alcayde de Toledo, natural del valle de Trasmiera en Asturias de Santillana, á quien el Rey por sus señaladas hazañas, trocándole su apellido en el de Alarcón, le dexó por Alcayde de la fortaleza y castillo de esta villa, mandando el año de 1194 á Don Sancho Fernández, tercer Maestre de Santiago, fundar en ella un hospital para su órden, del que fué Comendador.

Al presente se halla la villa bien murada con fuertes torreones, atalayas y murallas de cal y canto y sillería, con 6 puertas. Su castillo sobre una elevada y fuerte roca, habitado y reparado por el cuidado y á expensas de los Señores Marqueses de Villena, como Señor de los Estados de Alarcón. Tiene el citado castillo algunos cañones de hierro de diferentes calibres, pólvora y otros utensilios prevenidos á principios de este siglo. Inmediato á él se conserva hermosa fábrica en el plano llano, a medio circular, con sus asientos: forma un agradable aspecto, y los naturales la llaman la Peña del Mentidero: se fabricó año de 1587. Consiste el gobierno de esta villa en un corregidor que nombra el Excelentísimo Señor Marqués de Villena, quatro regidores, mitad del estado noble y mitad del llano: igualmente mantuvo S. M. hasta el año 50 del presente siglo un gobernador político y militar.

Sin embargo, de las entradas ásperas de esta villa, es el piso llano y buenas sus calles, la plaza de buenas vistas y de las mejores del país, donde está la iglesia de San Juan Bautista, las salas capitulares, con el antiquísimo archivo de la villa, de piedra sillería, todo bien trabajado: consérvanse  en él los privilegios de este pueblo, y entre ellos uno del Rey Alfonso X, expedido en la ciudad de Murcia á 30 de julio de 1256, en el que hace merced al concejo y vecinos de Alarcón, de los muros adentro, que entonces y en adelante fuesen francos de todo pecho y pedido, &c. También contenía este archivo un libro en que se conservaban los antiguos fueros de Alarcón, y al presente existe en la Real Biblioteca de Madrid, de órden del Rey. Mantiene actualmente el privilegio que llaman Borra de la Tierra, é igualmente el del Paso y el Travesío: ceden en beneficio de los propios de esta villa todos los productos de los arrendamientos en las muchas y excelentes dehesas que tiene la villa, los quales ascienden anualmente á 3000 pesos: estos se hallan concursados, y sólo la queda una corta consignación en calidad de alimentos.

Confina Alarcón con Tébar, Cañadajuncosa, Honrubia, Gascas, Olmedilla, Valverdejo, Valhermoso, Rubielos, Picazo y la Atalaya. En Gascas, pueblo de la jurisdicción de esta villa, se notan vestigios de antigüedad, hallándose en sus inmediaciones variedad de lápidas sepulcrales, gruesos cimientos subterráneos, monedas de bronce del tiempo de los Romanos, y una entre ellas donde claramente se lee Municipium Cascatium. Hay en su término pinares, encinas, romeros, enebros, sabinas, matas rubias y pardas: abunda en la uva ursi, y sus lechugas son celebradas en toda esta tierra. Entre la caza mayor es excesivo el número de perdices. Es tenida esta villa comúnmente  por de temperamento sano; pues reynan los ayres puros, cargados con los efluvios de muchos romeros, mejoranas y otras plantas odoríferas de que abunda. En el sitio llamado de Lucas, en los rompimientos que hicieron de montes y maleza encontraron gran copia de vasijas y dentro de ellas fragmentos de huesos, bolitas de barro, instrumentos de metal, y otras cosas dignas de observación y de una descripción más larga.

Fueron de esta villa el Doctor Don Andrés de Peralta y Castañeda, distinguido en empleos, y autor de varias obras de teología eclesiástica, siendo suyos los comentarios de Ester, la vida de San Martín, la historia de Tobías y otras obras; Fr. Martín de la Asumpscón, General benemérito, Trinitario descalzo, de la familia de los Morejones, quien regalo desde Roma el cuerpo de S. Mariano Diácono. Tiene la villa de Alarcón 5 parroquias y 3 ermitas, de las quales la de Nuestra Señora de la Orden, que se llamó de los Escuderos, mandóla fundar el Rey Don Alfonso IX á Don Sancho Fernández, tercer Maestre de Santiago, en 1194, con hospital para curar á los caballeros heridos en batalla.


LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 298-303

Iniesta según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Iniesta

La antigua villa de Iniesta está situada entre los dos ríos Xúcar y Cabriel, una legua a la derecha del camino Real que va de Madrid á Valencia. Es su parroquia vicaría, matriz de las villas de Minglanilla, la Puebla, la Graja ó la Granja, Castillejo, Villalpardo, y sus alquerías de Villarta, Herrumblar y Ledaña, que eran sus anexos: el año de 1782 se erigieron en vicarías con el cargo de cura animarun, contribuyendo todos los años a la matriz con el don de una libra de cera. Consta por una escritura de pergamino con dos sellos de plomo que el rey Don Juan de  Castilla cedió esta villa el año de 1421 al Infante Don Enrique de Aragón y Sicilia su sobrino, por lo que correspondió a la casa de Villena, pero el año de 1495 á 26 de noviembre salió de dicha casa y se volvió á incorporar en la corona de Castilla. Tiene en el día mil vecinos: goza las alcabalas de este pueblo la casa del Infantado. Hay un convento de Franciscos observantes fundado el año de 1531. Á dos leguas de distancia de esta villa; hacia su oriente está la célebre ermita de nuestra señora de la Consolación, situada en el terreno más hermoso que se descubre en toda la Mancha.

Sobre el nombre antiguo de esta villa nos parece más auténtico lo que dice Plinio, nombrándola Egelasta: hace descripción de las minas de sal que tenía en su término, a tres leguas de distancia, que son las que están actualmente en la villa de Minglanilla, distantes de aquí 3 leguas. Dista Iniesta de Cuenca 14 leguas: confina con Villarpardo, Villarta, Ledaña, Castillejo, la Granja, la Puebla, Minglanilla, Herrumblar, Villanueva de la Jara y Villagarcía. Tiene esta villa por la parte de oriente un arroyo procedente de la fuente dicha del Navo, y otro llamado la Acequilla, que riegan parte del término de esta villa, y se unen después con el río Cabriel. Tiene unas sierras de poca consideración, pero se juntan después con las llamadas Atalayas, de tanta elevación que se descubren á más de 14 leguas. Hay dos carrascales, uno llamado Orujan y otro Monegrillo, poblados de encina, romero, rubia, tomillo, aliaga y otros arbustos.

En todo el término de esta villa, y particularmente en sus alrededores, hay monumentos que demuestran ruinas de edificios magníficos, hallándose también medallas y monedas Romanas en gran cantidad. Dicen que estaba ya fundada Iniesta 500 años antes de la venida del Mesías. Tiene un castillo arruinado a la parte de poniente, que según su construcción es obra de los Sarracenos. Son las armas un castillo sobre dos ramos de retama, una corona sobre el castillo y dos leones al lado, todo en campo roxo.. Abunda el término de esta villa en retama. Fueron naturales de ella el P. Ambrosio López Cantero y Velázquez, General de la Órden de San Bernardo, y el P. Fr. Julián Pérez, Lector jubilado en la Órden de San Francisco, Calificador de la Suprema, Provincial de la provincia de Cartagena, y procurador general de su orden en Roma: le estimo mucho el Señor Felipe IV, é Inocencio X,  quien le presentó á la religión reliquia del cuerpo de San Fabián, que está en el convento de esta villa.

El fruto más singular de esta población es el azafrán; pues ninguna otra tiene la cosecha que ésta, la qual asciende á 4300 libras anuales. La cosecha de granos es mediana: se coge algún cáñamo y se cultiva la alfalfa, la uva ursi y la zarzaparrilla que dicen que es de tan buena calidad como la que viene de Honduras; críase sin sembrar la rubia. Texen sus vecinos bastantes lienzos basstos de lino y cáñamo, albornoces, sarguillas, bayetas, conchas grulladas, y pocos años hace se puso por cuenta de los Cinco Gremios mayores de Madrid una escuela de hilazas para paños diez y ocheno, veinte y quatreno, treinteno, treinta y seiseno y quarenteno. Los martes de cada semana son señalados para mercado desde el año 1782; pero no se usa. Hay dos maestros de primeras letras, dos maestras de labor para niñas, dos preceptores de latinidad y una cátedra de filosofía en el convento de San Francisco. Gobiérnase esta villa por un corregidor, que lo es también de Villanueva de la Jara. Consisten los propios de este pueblo en unos 3000 ducados de renta anual, fundados en dehesas, hornos públicos, censos y dinero puesto en el Banco Nacional de San Carlos, Se le concedieron á Iniesta los privilegios de que no pagara diezmo alguno, almojarifazgo ni otros derechos de las mercaderías que llevasen á los reynos de Aragón, ni de Aragón á Castilla; los quales se han perdido por no haber usado de ellos. Hay en el sitio de Vadocañas, tres leguas de esta población, una fuente de aguas minerales junto al río Cabriel. Son eficaces para controles crónicos de ventrículo, hipocondría, vicios de orina, dolores reumáticos y opilaciones. Hay canteras de jaspe.



LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 303-307


Imagen: Fondo Fotográfico Luis Escobar. Casa Palacio de Don Enrique de Aragón, actual Ayuntamiento. 1928. Original: Archivo de la Imagen de Castilla La Mancha — Colección: Fondo Fotográfico Escobar — Signatura: 01400-000032-010
http://hispana.mcu.es/es/registros/registro.cmd?tipoRegistro=MTD&idBib=12754108

Las Pedroñeras, Villagarcía del Llano, Vara de Rey, El Provencio según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Las Pedroñeras

Las Pedroñeras es villa de realengo, comprehendida en el suelo que llaman de Alarcón, y consta de 650 vecinos. Tiene su parroquia por anexos al despoblado de la villa de Robledillo de Záncara y Martín Bieco, distantes de esta villa una legua entre oriente y norte. Dista la población 13 leguas de Cuenca: confina con término de Belmonte, Pedernoso, las Mesas, entre cuyos dos términos hay una laguna llamada el Taray. También linda con Robledo, el Provencio, Santiago de la Torre, Robledillo, la Alberca, el término de la encomienda de Santiago y la villa de la Roda. Pasa por esta villa el camino Real, que de órden de S. M. se construye para Murcia, Cartagena y Alicante.

Pasa también por su término y por el del despoblado del Robledillo un río llamado Zángara, que nace según noticias cerca de Villarejo de la Fuente, terminando en el Guadiana con el término de Záncara: tiene cerca de la Alberca un puente de piedra y yeso; en cuyo curso por estos términos tiene bastantes molinos. Hay un monte de mata parda en el término de este pueblo, como de media legua. Es esta villa de población antigua, y se sabe que por los años de 1280 fué aldea de Alarcón. En 1448, o por entonces, se hizo merced y donación de ella á Don Juan Pacheco, Marqués de Villena; y por lo mismo fué aldea de la villa de Belmonte, como perteneciente al Marquesado de Villena, hasta que se incorporó a la corona Real, que la recibió Don Jorge Manrique, Capitán y Apoderado de los Señores Reyes Católicos Don Fernando y Diña Isabel, en 24 de septiembre de 1479, de que goza el Real privilegio y confirmaciones posteriores, aprovechamiento de sus términos y de sus despoblados. Sus frutos son los regulares de qualquier otro pueblo. El temperamento de esta población es sano.

Villagarcía de la Mancha

Villagarcía de la Mancha fué en lo primitivo una aldea muy pequeña que se llamó las Casas de Gil García, sujeta por entonces á la jurisdicción de Villanueva de la Jara: se separó de aquella villa el 28 de Enero del año de 1667 por gracia que obtuvo de la reyna Doña María de Austria en la menor edad de su hijo Don Carlos II, y desde entonces está inmediatamente sujeta a la corona Real. Se compone de 426 vecinos. Esta villa baxo el gobierno espiritual de la de Alarcón y la Jara; y por haber faltado éstas al cuidado que debían, erigió aquí el ilustre Cabildo de Cuenca una capilla con su cura para que asistiese á sus vecinos con el pasto espiritual que necesitasen, consignando 1000 reales anuales para sus precisos gastos, y 24 ducados de oro de cámara con que contribuye igualmente dicho cabildo, por bula Pontificia concedida en 6 de Enero de 1559 por la Santidad de Pío IV. Esta anexa á esta iglesia el heredamiento de la casa del Olmo, distante de esta villa una legua la que se compone de 6 vecinos. En la ermita de la Purísima Concepción está en el día la iglesia parroquial en tanto que se construye la nueva.

Dista este pueblo de Cuenca 14 leguas, y confina con la Iniesta, Ledaña, las Navas, Madrigueras, Quintanar del Rey, Tarazona, Villanueva de la Jara y el Peral. El río más inmediato a esta villa es el Xúcar. El arroyo de Valdemembra fué descubierto en este término el 30 de mayo de 1786 por Miguel Garzón, el qual reducido á cañería, puede ser un socorro muy grande para esta villa. En el año de 1779 Pedro González Escudero, de oficio pastor, descubrió otro manantial, en la dehesa del Villar, y otras varias aguas que aprovechadas por sus vecinos pueden remediarlos en la escasez que suelen padecer. Esta situada esta villa á la falda de un repecho. Es natural de este pueblo el Excelentísimo Señor Doctor Don Alonso Núñez Haro y Peralta, Arzobispo de México, que era Virrey Capitán General interino en 1787, y á sus expensas se erige en esta villa la magnífica parroquia; también es de aquí el Ilustrísimo Don García Núñez, hermano del antecedente, Juez honorario de la Audiencia de Oviedo y Corregidor que fué de la villa de la Iniesta y la Jara. Los frutos más singulares de su término son trigo claro y candeal, que aprecian mucho en Valencia, todo género de frutas especiales, y el vino y el aceyte que son excelentes; asimismo el azafrán, que dá como unas 640 libras. Goza esta villa de un clima muy sano.

Vara de Rey

La villa de Vara de Rey lo es desde el año de 1537, en virtud de Reales privilegios concedidos por el Señor Don Carlos y Doña Juana su madre. Sus armas son un Rey sentado en su trono. Las salas capitulares son magníficas miradas por la fachada principal del norte; pero vistas por la banda contraria se nota gran diferencia. Se compone este pueblo como de unos 500 vecinos, incluyendo los e sus aldeas del Carmen y Simarro. Tiene estas parroquias por anexos las referidas aldeas, la villa de Casas de Guijarro y la aldea de Casas de Benítez. Dista esta villa de Cuenca 11 leguas , lo que está respecto de ésta al norte, y tiene al poniente á su capital San Clemente á dos leguas. Confina con Sisante, Thébar, Atalaya, Cañabate, Perona, Villar de Cantos, Casas de Fernando Alonso, Haro, Pozoamargo y sus anexos. El término y jurisdicción de este pueblo ocupa quatro leguas. Tiene solo un pinar en las inmediaciones de Pozoamargo. Los frutos regulares de esta villa son los comunes de todas partes. Hay en sus términos canteras especiales para qualquier género de edificio que se ofrezca.

El Provencio

El Provencio es una villa de señorío, distante de Cuenca, que tiene al N. E., unas 13 leguas, y al mismo rumbo está su cabeza de partido San Clemente, como á dos leguas. Confina con los términos de Villarrobledo, las Mesas, Pedroñeras, el Robledillo, Santiago de la Torre, Alberca y San Clemente. Se halla situado en llano, pero si le faltan las aguas está sujeta a mucha miseria, aprovechándola muy poco las de un arroyo que pasa junto a la población y desagua á cosa de media legua de ella en el río Záncara, donde recibe las corrientes del río Rus. Su población es de 400 vecinos y se gobierna por un alcalde ordinario.



LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 307-312

Tarazona de la Mancha y Villanueva de la Jara según la Geografía de Tomás Mauricio López (1796)

Tomás López: Diccionario Geográfico de España
Tarazona de la Mancha

Tarazona de la Mancha es villa de bastante consideración: llamóse en lo antiguo Tarazona del Marquesado: no se sabe el motivo; pues siempre perteneció al patrimonio Real. La concedió el título de villa á solicitud de sus naturales el año de 1553 el Emperador de Carlos V. Antes fue aldea de la jurisdicción de Villanueva de la Jara. La señaló escudo de armas, que son unas águilas imperiales, y en su centro un castillo sobre un prado, con dos leones en ademán de asaltarle, y en medio del prado un cordero. El servicio con que contribuyeron por esta gracia sus vecinos fue medio peso cada uno. Dista de Cuenca 15 leguas, de San Clemente 7, y se compone de 1200 vecinos. Está situada esta villa en un declive muy suave, corriendo de norte á mediodía un corto arroyo, cuyas aguas y las llovedizas no se detienen en el pueblo, por tanto sus naturales son de robusta salud, talla grande, excesivas fuerzas, genios dóciles e industriosos. La gobierna un corregidor de letras que pone el Rey desde el año 1744. A este corregimiento que está en la clase de segundos, se agregaron otras dos villas, que son Quintanar del Rey y Madrigueras. Confina con la expresada villa del Quintanar, y las de Villagarcía, Albacete, La Gineta y La Roda. Como a legua y media pasa el río Xúcar. Hay en este pueblo dos escuelas públicas de primeras letras y una cátedra de latinidad con decente dotación.

Tiene su término de oriente á poniente quatro leguas, y de norte á mediodía dos y media. Son unos melones exquisitos, aceyte muy puro, el azafrán copioso y medrado, y sus vinos excelentes, consistiendo su principal comercio en los dos últimos géneros referidos. Son naturales de este pueblo Don Benito Panigo, Mariscal de campo; Don Pedro Ballesteros, Contador general de Buenos Ayres; Don Andrés Cardona, Abogado de los Reales Consejos, famoso canonista, cura de Sisante, que imprimió el año de 1784 un tomo en 4º, probando la obligación de los párrocos en desterrar la ociosidad de sus feligreses, y otras obras; el V. P. Fr. Juan Picazo, Francisco descalzo, que padeció martirio en las misiones de la India. En su término se descubre una veta de greda arcillosa parecida al añil, con la que le adulteran y comerciam los vecinos de este pueblo. En el año de 1790 se completó en esta villa una fábrica de indianas y pañuelos, con buenas oficinas, 100 tornos, 31 telares, muchos moldes, 7 mesas para estampar, cilindros, bruñidor y buen prado para el blanqueo de las telas-

Villanueva de la Jara

Villanueva de la Jara es realenga, gobernada por un corregidor de letras desde que por las guerras entre la infanta Doña Juana y su hermana Doña Isabel la Católica, alteraciones del Marqués de Villena, y especialmente de Don Diego López Pacheco, separándose de éste y acogiéndose al sagrado de la Reyna, se firmo el privilegio en Medina del Campo á 10 de enero de 1481 y quedó sujeta á la corona. Gobernábase ántes por dos alcaldes ordinarios: se compone de unos 700 vecinos. Tiene por anexos varios pueblos de su inmediación. Compone su cura párroco la deuda de 3000 ducados, y tiene á sus órdenes 7 tenientes, con otros 5 para otros tantos anexos. Hay quatro conventos, uno de Franciscos observantes, otro de Carmelitas descalzos, otro de religiosos de Santa Clara, y el otro de Carmelitas descalzas, fundado por Santa Teresa de Jesús.

Dista de Cuenca 12 leguas y de San Clemente 6: confina con Hiniesta, Villagarcía, Casimarro, Rubielos Baxos y Altos, Alarcón, Pozoseco, el Peral y la Motilla del Palancar. Tiene a 200 pasos el río que llaman Reato de Valdemembra, que no siendo muy grande no le ha faltado agua aún en los años más secos: dícese por tradición que así lo prometió Santa Teresa de Jesús á sus moradores cuando vino á fundar. Tiene un puente de cal y canto. A dos leguas por el lado del poniente y por medio de la jurisdicción de esta villa pasa el río Xúcar, donde tiene esta villa dos molinos harineros con quatro piedras cada uno. A un quarto de legua tiene este pueblo un carrascal baxo: también una dehesa para el ganado del abasto del pueblo, de una legua de largo y poco menos de ancho.

Tiene por armas una jarra llena de azucenas, y parece se llamó antes Villanueva de la Jarra. Tomó las armas esta villa, el Peral, la Motilla,  Barchín y el Cañabate contra el Marqués de Villena,  y se reduxéron a la corona. Habiendo pasado la tropa de Felipe V y la Imperial en el año 6 de este siglo, desbarató la última los archivos eclesiástico y secular de este pueblo. En el convento de San Francisco está mucha parte del cuerpo de Santa Silveria, regalo hecho por Benedicto XIV al Excelentísimo Señor Don Alfonso Clemente y Aróstegui. En el de Santa Ana de las Carmelitas descalzas está el de la V. M. Ana de San Agustín, natural de Valladolid, compañera de Santa Teresa y sucesora en el oficio de prelada, que pasó a fundar convento en Valera, el qual ya no existe: sus virtudes están aprobadas en grado heroico, esperándose brevemente su canonización. En el de Santa Clara ó San Franciscas o el de la M. Miliana de Christo, fue hija de esta villa.

 De ella fue fray Alonso Ferrer, religioso observante: el Excelentísimo Señor Cardenal de la Cueva; el Ilustrísimo Señor Don Francisco Valero y Losa, Obispo de Badajoz y después Arzobispo de Toledo,  cuyo dos distinguidos sugetos fueron curas de esta parroquial; el Señor Cossi, Provisor y Arcediano e Cuenca, y Obispo de Valladolid; los Señores Ilustrísimos Don Pedro Clemente, Obispo de Osma,  y el Excelentísimo Señor Don Alfonso Clemente ya referido, Gran Cruz de la órden de Carlos III, Comisario general de la Cruzada, del Consejo de Estado de S. M., su Embajador Plenipotenciario y Extraordinario en la Corte de Nápoles, y encargado del gobierno del reyno en el tiempo de la menor edad del actual Soberano: también fué de aquí el Reverendo Padre fray Malachías Saiz, General dos veces de la religión de San Bernardo, y Don Felipe Joseph Valero y Cardos, con otros que viven actualmente.

Las casas del ayuntamiento es edificio que merece la atención de los que viajan. Es bastante abundante el terreno en frutos, y en particular son ponderadas de ciruelas de frayle, que se envían por regalo á Madrid y otras partes. Tiene para su uso las fábricas necesarias de lienzo llano y labrado, paños burdos, bayetas, &c, consistiendo su principal comercio en granos, azafrán, vino y lanas. Hay un mercado los jueves de cada semana, asimismo escuela para niños, fundación del excelentísimo Señor Clemente; y para niñas dotación de dicho Don Juan Esteban Valero; y un colegio fundado por dicho Señor Excelentísimo para gramática. Tiene un corregidor para su gobierno que nombra S. M., 12 regidores perpetuos, entre ellos su Alférez mayor Don Andrés de Alarcón, que exerce por sí ó su teniente la jurisdicción Real en las vacantes, por privilegios de su casa y servicios hechos a S. M. Á media legua de distancia entre norte y oriente, está la fuente de la Burueca, saludable y celebrada por la delicadeza de sus aguas.


LÓPEZ, Tomás Mauricio: Geográfica Histórica Moderna. Tomo II. Comprehende las provincias de Toledo, Guadalaxara y Cuenca. Imprenta de la viuda de Ibarra. Madrid 1796. BIBLIOTECA DE LA ABADÍA DE MONTSERRAT. pp. 292-298

Imagen. BNE.MSS.MICRO/14485