El corregimiento de las diecisiete villas (fotografía: Jesús Pinedo)


Imagen del poder municipal

Imagen del poder municipal
EL CORREGIMIENTO DE LAS DIECISIETE VILLAS EN LA EDAD MODERNA (foto: Jesús Pinedo)

Wednesday, November 12, 2025

Pérez de Trucios, hidalgos y canteros de Mota de Cuervo

 

Bernardino Pérez es el litigante, casado con una hija de Diego Ortiz. Su padre era Pedro de Trucios que vivía en la casa solar de Laguanaz (La Aguanaz), en el valle de Trucios y estaba casado con una hija de Diego Merlín de Pando, llamada Catalina de Trucios. El abuelo era Diego de Trucios, casado con María Sánchez de Trucios. El bisabuelo era Juan Pérez de Trucios.

Bernaldino había llegado mancebo primero a Belmonte y Villanueva de los Infantes. En un primer momento, antes de establecerse definitivamente, había llegado en compa. Algunos de los vecinos del valle de Trucios, contemporáneos del abuelo y padre de Bernardino, tienen apellidos que luego veremos en la Mancha: Juan de Rueda, Juan Hermoso, Juan de Acedo, Pedro de la Fuente o Juan de la Calera (con casa solar en la Calera).

No podemos garantizar que fuera cantero, solo suponerlo

Testigos: 

Martín de Montellano, vecino de Villaescusa de Haro, natural de Montellano en el valle de Salcedo, hombre hijodalgo

Juan de Carranza. vecino de Almendros, natural del valle de Carranza, hombre hidalgo de sesenta años

Pedro de Cueto, vecino de Belmonte, natural del valle de Trucios, hidalgo de noventa años

Martín Díaz de Pando, vecino del barrio del Pando en el valle de Trucios, 55 años

Pedro Rodrigo, vecino y natural del calle de Romania de Acy, en el valle de Trucios, hidalgo de 60 años


ACHGR, sign. ant. 304-553-95, es expediente incompleto




Tuesday, November 11, 2025

Portillo de Tribaldos

 La Chancillería de Granada declarará como hombres pecheros a varios vecinos del lugar de Tribaldos, perteneciente al partido de Uclés: Álvaro de Coronado, Diego Dávila, Miguel Portillo y Andrés Rodríguez en marzo de 1557. Treinta años después los hijos de Miguel Portillo, Diego Y Sebastián, intentarán una revisión de la sentencia. A pesar de que ambos hermanos lleven como segundo apellido el de Araque junto al de Portillo, serán considerados pecheros por sentencia de 17 de octubre de 1594. Al parecer la nueva pretensión venía después de una ejecutoria del año 1585 o 1586, común al resto de los pueblos, que había permitido el acceso de los hidalgos a la mitad de los oficios en los concejos. En virtud de esa ejecutoria, Diego Portillo había accedido al oficio de alcalde ordinario por el estado de los hijodalgo. 

El pleito aparecía inconcluso en 1612, pues los hermanos Portillo eran deudores de las costas.

Aunque los Portillo habían iniciado hacia 1550 las diligencias para ser considerados como hidalgos en Montalbo y Tribaldos, sería la rama de Motilla la que conseguiría la titulación hidalga, pero ya en fecha tardía del siglo XVIII, cuando se desplazan a Villanueva de la Jara y Requena. También conseguirán ejecutorias en esas fechas los Portillo de Villar de la Encina y Villaescusa de Haro, sin que tengamos constancia de la relación familiar entre estas ramas.


ACHGR, sign. ant. 303-455-1

Monday, November 10, 2025

Los Portillo de Motilla

 Los Portillos de Motilla del Palancar, cuando pasan a Villanueva de la Jara, en 1771, quieren ver su hidalguía en la ejecutoria ganada por un ascendiente familiar de Valladolid que había ganado ejecutoria de hidalguía en 1626. Se trataba de Gonzalo Díez Portillo Ribadeneira, considerado como segundo nieto de Diego Díez Portillo y de Inés Daza. Cuando en 1768, el motillano Francisco Portillo y Carcajona se avecinda en Villanueva de la Jara y sus hermanos Alonso y Ana María, avecindados en Requena, remontarán su ascendencia al referido Diego Díez Portillo y su mujer Inés Daza. El referido Francisco se presenta como hijo de Esteban Portillo y Pacheco, nieto de otro del mismo nombre, segundo nieto de don Benito Martínez Portillo, tercer nieto de Esteban Portillo, cuarto nieto de Pedro Portillo y quinto nieto de Juan Portillo que había sido hijo de los referidos Diego Díez Portillo e Inés Daza.

Los Portillo remontaban sus orígenes a la casa solar de Escandón


GENEALOGÍA

1.- Diego Díez Portillo e Inés Daza

   2.- Juan Portillo y Ana María Martínez Cejalbo

     3.- Pedro Portillo y Ana Martínez

        4.- Esteban Portillo y Catalina Martínez

           5.- Don Benito Martinez Portillo y doña Catalina García Cardos

               6.- Don Esteban Portillo y doña María Juana Pacheco

                    7.- Don Esteban Francisco Portillo y doña María Luisa Carcaxona

                             8.- Francisco, Alonso y María.

El primero mencionado, Diego Díez Portillo era hijo de Juan Díez Portillo, hermano de Diego Díez de Escandón, dueño de esta casa solar de la que toma el apellido. La ejecutoria de los hermanos es de primero de agosto de 1775


Los Portillo han sido estudiados por Julia Toledo y Sebastián Hernández, donde se pueden ver sus orígenes en la Montaña.


Los Portillo de la Casa Torre de Escadón a Motilla del Palancar

https://alariberadelvaldemembra.blogspot.com/2019/11/los-portillo-de-la-casa-torre-de.html


ACHGR, sign. ant. 301-171-396

Guerra e hidalguías en Belmonte (1637-1646)

 El conflicto venía por la obligación llegada desde la ciudad de Cuenca de alojar a siete soldados montados del teniente Carlos Tolentino en la villa de Belmonte el año 1668, correspondientes a la compañía del capitán de corazas Juan Bautista Piñatelo. La villa debía pagar 800 ducados, pero dado que siempre habían pechado en ella pecheros e hidalgos por viejos privilegios, ahora se pretendía la exención de hidalgos. Tanto en Castillo de Garcimuñoz como en Belmonte de acuerdo a sus viejos privilegios los hidalgos pagaban impuestos o pechos, pero con motivo de las guerras, entre 1637 y 1642 los hidalgos se habían registrado en libros aparte para sus propios y diferenciados servicios militares, constituyéndose registros que hasta entonces no existían en la villa de Belmonte. Esta contradicción llevó a un enfrentamiento en el ayuntamiento de la villa de Belmonte de 19 de febrero de 1668, entre los regidores pecheros. 

Entre los vecinos a los que se les exige demostrar su condición hidalga en 1668 están: 

  • Juan Gasco
  • Juan Sánchez de la Maza y Francisco de la Maza Ramírez su hijo
En 1637 y por una orden del corregidor de San Clemente se hizo un registro de hidalgos, en lo que será una tónica general: el corregidor de San Clemente se entrometerá en el reclutamiento de hidalgos en tierras de señorío por delegación del Consejo de Castilla. Se detalla su edad para el año 1637 y su situación, vivo o muerto, y si tienen hijos o no en 1668. En los años sucesivos se van incorporando nuevos nobles, entre los que destacan apellidos como Palomar, Burillo, Luján o Mena (al final de la lista). Se trata de oportunistas que aprovechan las necesidades militares de la corona para ver reconocida momentáneamente la condición hidalga. Pero también se produce una deserción de nobles que abandonan el pueblo para evitar posibles reclutamientos. Del registro de los años 37, 38 y 39 se pasará el año 1641 al reclutamiento obligatorio de nobles mayores de 16 años para una jornada en Cataluña y Aragón acompañando al rey; dicha reclutamiento se hará desde San Clemente. Una decena de ellos irán a esta jornada, entre los que señalamos nuevos hidalgos con el apellido Burillo o los Morales (que ya de antaño ligarán su apellido al de Inestrosa) o hidalgos que consideramos empobrecidos como los Ramírez, otros como los Melgarejo los vemos acudir a la guerra voluntariamente; el resto de hidalgos contribuirían con su dinero para sufragar los costes de guerra de los hidalgos pobres reclutados. De nuevo el año 1642, y en cumplimiento de una orden del Consejo de Castilla, ejecutada por el corregidor de San Clemente fueron llamados de nuevo hidalgos mayores de diecisiete años para la guerra de Cataluña. No habría nuevo reclutamiento de hidalgos hasta el año 1646 con el llamado Tercio de los ochocientos hidalgos del conde de Priego. Si en las jornadas de 1641 o 1642, se vio en la guerra una promoción, para el año 1646 los hidalgos huyeron de la guerra pagando su exención por doscientos ducados de vellón y librándose así de la guerra todos los hidalgos belmonteños. En cualquier caso, sí hubo una solidaridad entre los hidalgos belmonteños, pues cada cual aportó los reales que pudo, en cantidades que iban de veinte reales hasta los noventa reales por cabeza, hasta completar los 2200 reales, es decir, doscientos ducados. Posteriormente hacia 1647, uno de los linajes que pedirá la condición hidalgo será el linaje de los Castillo, Pedro del Castillo y sus hermanos, pretendiendo ser descendientes de la anteiglesia de Abadiano

 
  • Don Antonio de Montoya y Cárdenas, 48 años
  • Don Pedro de Vizcarra y Espinosa, en 1668, muerto y sin hijos
  • Don Julián Valdés, muerto ya y sin hijos
  • Don Antonio Henero (o Venero) de la Gruesa, sin hijos
  • Don Diego Delgadillo de la Cadena, tiene tres hijas
  • Don Alonso de Córdoba, ausente muchos años sin haber dejado hijos
  • Don Bernardino de Montoya
  • Don Juan de Montoya Ponce de León, 61 años
  • Don Diego Donoso Merchante, 60 años
  • Don Alonso de Osorio, y sus hijos don Pedro de Osorio y Juan de Osorio, sacerdote
  • Ilegible, con seis hijos
  • Don Jerónimo Pacheco, casado con seis hijos: Don Lope Pacheco y Jerónimo Pacheco, estudiante de Alcalá, otros dos hijos frailes
  • Don Juan Ramírez con un hijo mancebo
  • Don Pedro de Araque Montoya
  • Doctor don Gabriel de Araque 
  • Don Jerónimo Carrillo
  • Don Martín de Buedo
  • Don Diego Melgarejo de Silva
  • Don Pedro de Belmonte y Avilés, muerto sin hijos
  • Don Diego de Alarcón Cabrera, del hábito de San Juan y familiar del Santo Oficio
  • Don Diego Fajardo y Alarcón, ya muerto, con dos hijos, el uno sacerdote y el otro llamado Don Diego Fajardo
  • Don Agustín de Alarcón Fajardo
  • Don Lope Pacheco y Guzmán
  • Don Juan de Montoya Ponce de León, muerto y sin hijos
  • Doctor Pedro Vázquez Guzmán, con casa solariega conocida de don Martín de Guzmán. Con dos hijos, uno en Granada casado y otro mancebo
  • Luis Ramírez y Peñafiel, 78 años, ya muerto. Tiene un hijo don Bartolomé Ramírez
  • Don Alonso de Altarejos, ya muerto
  • Don Pedro de Belmonte y Avilés, 67 años, ya muerto, con un hijo que se dice don Diego de Belmonte
  • Don Miguel de Altarejos, ya muerto y sin hijos
  • Don Diego de Inestrosa, ya muerto y sin hijos
  • Juan de Villena
  • Don Jerónimo de Céspedes, ya muerto y con un hijo don Antonio de Céspedes
  • Don Juan Pérez de Arriaga, marchó a Málaga
  • Don Pedro Vázquez de Guzmán, muerto y sin hijos
  • Don Diego Muñoz de Inestrosa, 64 años, y su hijo Fernando Muñoz de Inestrosa (este muerto en 1668) con un nieto que se dice don Diego Muñoz
  • Don Juan Baustista de Inestrosa y Ludeña, muerto y sin hijos
  • Don Cristóbal de Moya, ausente en Madrid, tiene dos hijos, don Pedro y don Manuel, que son beneficiados y gozan de fueros eclesiásticos
  • Don Sebastián Velarde de la Vega, con diez hijos, pero sin sucesión en la villa en 1668
  • Don Juan Ortuño de Villena, muerto, tiene un hijo
  • Bartolomé Ramírez Figueroa, muerto sin hijos
  • Don Diego de Haro Lodeña, muerto sin hijos
  • Bartolomé Ramírez Inestrosa, vivo en 1668
  • Don Baltasar Ramírez Torremocha, tres hijos son sacerdotes y un hijo es casado
  • Don García Carrión, muerto y sin hijos
  • Don Juan de Haro Lodeña, muerto y sin hijos
  • Don Antonio de Haro Lodeña, vivo en 1668
  • Don Sebastián de Moya, muerto con cuatro hijos, uno sacerdote y los demás ausentes de Belmonte
  • Antonio de Araque, ya muerto y con un hijo llamado don Alonso de Araque
  • Don Pedro de Inestrosa Zurita
  • Don Cristóbal Vázquez de Guzmán
  • Don Antonio Sandoval
  • Don Francisco Monreal
  • Don Juan Varela
  • Don Juan Ramírez de Ribadeneira
  • Don Diego del Castillo
  • Don Bernardino Collado
  • Don Pedro Suárez
  • Don Fernando de Tébar
  • Don José Granero
  • Don Pedro de Luján y Frías
  • Don Diego Palomar
  • Don Pedro Pallarés
  • Don Miguel Burillo de la Cadena
  • Don Diego Burillo
  • Don Pedro de Araque de Mena
  • Juan Morales Inestrosa
  • Juan de Valcázar
El alojamiento de siete soldados montados y su teniente en 1668, se dio entre el 16 de abril y el nueve de mayo. Los soldados se alojarían en casas de labradores, que se turnaron por semanas para hacer menos costoso el alojamiento y manutención.


ACHGR. sign. ant. 302-214-1