El corregimiento de las diecisiete villas (fotografía: Jesús Pinedo)


Imagen del poder municipal

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EL CORREGIMIENTO DE LAS DIECISIETE VILLAS EN LA EDAD MODERNA (foto: Jesús Pinedo)
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jueves, 12 de octubre de 2023

LA FUNDACIÓN DE SAN PEDRO MARTIR (MOTILLA DEL PALANCAR)

En 1656 el concejo de Motilla del Palancar decide construir una ermita, dispone reservar para costear la obra con el rompimiento de un tercio de las tierras de la dehesa del Quejigar, cuatro fanegas. Como administrador de la nueva empresa se hará cargo Benito Martínez Portillo. Nos han quedado varios testimonios de la fundación de esta ermita, bajo la advocación de San Pedro Mártir, el presbítero Juan de Resa nos decía:

"El concejo de esta villa trató se hiciese a devoción una ermita de San Pedro Mártir y que había que poner una hechura de San Antonio de Padua"

Para financiar la edificación de la ermita cada vecino que quiso aportó dos celemines de trigo para la siembra voluntariamente. Tenemos duda que la ermita se construyera y creemos que por los testimonios posteriores, en los que se pedía cuentas a Benito Martínez Portillo, se reconocía que este no había recibido cantidad alguna y que el fruto de la cosecha del trigo aportado por los vecinos andaba en poder de los propios vecinos por el estado de necesidad, se nos dirá. Lo que era limosna de los vecinos era resultado de ese estado de necesidad, pues era el propio concejo el que había dispuesto dar dos celemines a los vecinos para siembra por cada fanega para aliviar su necesidad y si hubiera remanente dedicarlo a la edificación de la ermita.

Quien nos narra más fehacientemente los intentos para la fundación de la ermita de San Pedro Mártir en Motilla del Palancar es el escribano Martín García Valverde que, curiosamente, ya muestra la confusión entre la devoción y el interés de los vecinos por el cultivo del azafrán en este pueblo, pues a partir del tercer año las tierras se sembraron con el nuevo cultivo. De nuevo nadie sabía nada de las rentas obtenidas, lo que obligó a la intervención de la justicia eclesiástica del obispado para averiguar el destino de rentas y dineros:

"por el concejo de esta villa se hiço aquerdo para que se hiciere una ermita de la abocación de San Pedro Mártir y para que se pudiese hacer se asignó un pedaço de tierra, no sabe de que cantidad fuese; para que se sembrase de limosna y lo que procediese fuese para la labranza de la dicha ermita y que se nombró por administrador al dicho Benito Martínez Portillo y en el primer año que se sembró la dicha tierra tiene por cierto se puso en poder de Pedro Sáez Muñoz ya difunto y en el segundo en el licenciado Juan de Resa presbítero y vecino de esta villa y después se arrendó a vecinos para plantar açafrán no sabe este testigo entrase en poder del dicho Benito Martínez trigo ni maravedíes algunos, que de horden del tribunal eclesiástico se hiço depositario de lo procedido de la dicha tierra a el dicho licenciado Juan de Resa"

La ermita no aparece lógicamente entre las detalladas de la visita eclesiástica de 1656, pues no estaba edificada. Las existentes entonces eran las de San Sebastián, San Marcos, San Laurencio,  San Cristóbal, la Virgen de la Concepción y San Roque.


ACHGR, Pleitos civiles, C-10053-11