El corregimiento de las diecisiete villas (fotografía: Jesús Pinedo)


Imagen del poder municipal

Imagen del poder municipal
EL CORREGIMIENTO DE LAS DIECISIETE VILLAS EN LA EDAD MODERNA (foto: Jesús Pinedo)
Mostrando entradas con la etiqueta Castañeda (los). Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Castañeda (los). Mostrar todas las entradas

domingo, 3 de marzo de 2024

JOSÉ DE HARO CASTAÑEDA Y FERRER

 

GENEALOGÍA DE DON JOSÉ DE HARO CASTAÑEDA Y FERRER (bautizado el 5 de mayo de 1666 en Villanueva de la Jara)

PADRES

Antonio de Haro y Castañeda, vecino de Chinchilla, y Ana Isidora Ferrer, natural de Villanueva de la Jara

TÍAS POR PARTE DE PADRE

Francisca de Haro (madre de Fernando Antonio Núñez y Robres, caballero de la orden de Montesa) y Magdalena de Haro (madre de Marcos Enríquez, caballero de la orden de Montesa)

ABUELOS PATERNOS

Diego López de Haro y María Castañeda, naturales de Alarcón, y residentes en Motilla

ABUELOS MATERNOS

Juan Ferrer, natural de Villanueva de la Jara, y Francisca Rosillo Ruiz de Alarcón, natural de Palomares de Campo (hija de Gaspar Rosillo, natural de San Clemente y sobrina de Francisco de Alarcón, obispo de Pamplona y Córdoba, del linaje de los señores de Valera de Arriba)

Partida de Bautismo de Juan Ferrer

Villanueva de la Jara, 27 de febrero de 1587, hijo de Martín Ferrer y Ana de la Osa

En la iglesia de Santa María de Alarcón se encontraban los libros sacramentales del resto de iglesias de la villa de Alarcón: Santísima Trinidad, San Juan, Santo Domingo, Santiago y la propia iglesia de Santa María. Los libros habían sido trasladados allí desde el resto de iglesias. En 1654, la iglesia de la Santísima Trinidad sufre un incendio en el que se pierden los libros de Bautismo. El incendio afecta a la sacristía y archivo parroquial.

Diego López de Haro había sido bautizado en la parroquia de la Trinidad, donde se bautizaban los hombres principales de Alarcón; los bautizados en esta iglesia tenían el privilegio de antelación para las becas del Colegio de Cuenca del Monte Olivete de Salamanca. Don Diego de Haro vivía en la calle de los Caballeros, perteneciente a la parroquia de Santa María; los Haro tenían en la puerta de su casa y los cuartos de las mismas, sus armas en los escudos. Los Haro de Alarcón tenían su enterramiento ("sepultura sumptuosa") en el presbiterio de la iglesia de San Juan


Archivo Histórico Nacional, OM-CABALLEROS_MONTESA,Exp.243

sábado, 25 de julio de 2020

Los Castañeda de Alarcón




Pedro, Gabriel y Juan Castañeda eran hijos de Pedro Castañeda y Catalina de Páez y nietos Diego del Castillo y Catalina Granero. Diego del Castillo fue dos años alcaide de Ves, donde ya había sido alcaide el bisabuelo Pedro. La familia tenía su hacienda en Gascas, donde poseía el molino de Valdespinar, y en La Motilla del Palancar, y su aldea Gabaldón. En Motilla, la familia tenía un mesón y unas casas, así como heredades. Esta hacienda de Motilla se debió vender hacia 1530. También tenían bienes en El Peral. El bisabuelo Pedro de Castañeda se decía que había bajado de las Montañas; casado primero con una tal Marina y en segundas nupcias con Catalina Martínez, natural de El Cañavate. La hacienda que la familia poseía en El Cañavate es probable que fuera llevada al matrimonio por la mujer y ya sabemos de su litigio con Hernando del Castillo, alcaide de Alarcón.
La procedencia del bisabuelo Pedro del Castillo de las Montañas posiblemente fuera invención legendaria, pues se reconocía que el apellido lo había tomado de Castillo de Garcimuñoz
Dezían que se avya venido de las Montañas y poblado por aquella tierra en el Castillo de Garcimuñoz y avya oydo dezir que de allí le avían puesto nombre del Castillo
No obstante, sabemos que el bisabuelo Pedro del Castillo tenía un hermano llamado Juan Valverde, enemigo mortal del alcaide de Alarcón Hernando del Castillo, de quien sufriría unas represalias que le costarían finalmente la vida.
Diego del Castillo, alcaide de Ves, tenía un hermano llamado Juan de Castañeda, que asumía a veces la tenencia de la fortaleza de Ves por su padre Pedro. Otro hermano era Alonso de Castañeda, vecino de Iniesta, que había tomado testigos en Motilla del Palancar para conseguir ejecutoria de hidalguía en Iniesta. A Diego del Castillo se le conocían dos hermanos: Pedro Castañeda, que casaría con la mencionada hija de Diego Páez, y Antón Castañeda. Antón fue vecino de Barchín durante algún tiempo, donde poseía casa y ganados y algunos bienes raíces comprados a un alcalde de Barchín que no se especifica, así como casas en Iniesta, donde otra rama de la familia, procedente del mencionado Alonso tenía propiedades. Diego del Castillo había fallecido en Villanueva de la Jara, donde poseía unas casas.
Alarcón era villa franca, donde ni pecheros ni hidalgos pagaban impuestos (no así en sus aldeas con un régimen diferenciado). La hidalguía se reconocía por el desempeño del oficio de juez, en manos de hidalgos, y la reserva a este estado de unos de los dos alcaldes de la Santa Hermandad en el siglo XVI (el otro estaba reservado a pecheros).
A los Castañeda, como hemos referido, se les conocía, desde el bisabuelo Pedro, una hacienda de ganados, labor y molinos de Valdespinar. La hacienda del bisabuelo en Gascas, debió ser ampliada por su hijo Diego y nieto Pedro en la aldea de Gabaldón y en Motilla, así como en Valhermoso y El Peral. La capilla de enterramiento familiar estaba en la iglesia de San Juan Bautista de Alarcón.





Testigos en 1533

Martín de Segovia, 75 años, clérigo en Quintanar, donde había llegado a finales del siglo XV, se casó y luego enviudó, haciéndose clérigo. De muchacho, vivió en Alarcón, donde fue sacristán dos años.
Juan García de Olmedilla, por sobrenombre Teyllo, vecino de Villanueva de la Jara y natural de Olmedilla de Alarcón. 80 años.
Pascual Carretero, pechero de 73 años de Motilla del Palancar.
Mateo Sánchez, pechero de Alarcón, 72 años.
Garci Zapata el viejo, vecino de Alarcón. Hidalgo de 68 años.
Juan de Iniesta, pechero de Alarcón de 63 años
Bernaldino Villalba, vecino de Barchín, 75 años.
Cristóbal de la Parrilla, vecino de Alarcón, 80 años
Cristóbal Díaz, morador de Valhermoso.
Juan Guerrero, vecino de Motilla del Palancar. + 60 años. Nieto de Alonso Mateo
Juan Sánchez de Barchín, vecino de Motilla, 60 años
Alonso de la Jara el viejo, vecino de La Motilla, 82 años, nieto de Antón Sánchez, en casa del abuelo, se alojaban Pedro del Castillo y Juan Valverde, que fue asesinado en Ocaña. Uno de los dos hermanos había tenido la tenencia de la fortaleza de Cuenca.


ACHGR, HIDALGUÍAS, SIGN. ANT. 301-22-09. Juan de Castañeda
ACHGR, HIDALGUÍAS, SIGN. ANT. 301-23-10. Gabriel de Castañeda

jueves, 15 de febrero de 2018

Pedro del Castillo, alcaide de la fortaleza de Ves

Al capítulo treinta y tres dixeron que en esta villa ay un castillo, el qual es una peña muy grande, alta y tajada alderredor della, y esta se llama Peña del Castillo y en el rrellano della puede en la yerba del ahijarse un pegujico de ovejas. La qual dicha Peña Castillo esta unida y asida con la mesma otra peña sobre que está fundado el pueblo, y entre el pueblo y el mesmo castillo en la frontera y entrada de la dicha Peña Castillo esta hecho un edifiçio de casas de paredes de tierra altas, y paredes muy gruesas, que se llama la Casa el Castillo. Y en esta casa es donde a tenido e tiene su habitaçión y morada los alcaldes que an seydo y son del dicho castillo (Relaciones Topográficas de Felipe II. Capítulo 33 de las respuestas de la villa de Ves)

Acabadas las guerras del Marquesado, Pedro del Castillo, alcaide de la fortaleza de Ves, entró en pleitos con Diego López Pacheco, II Marqués de Villena, por una serie de propiedades que el marqués le había embargado. Pedro del Castillo poseía diez ruedas de pan moler y otra de batán en dos casas de molinos, ambas en la ribera del Júcar, una en término de Alarcón y la otra en término de Cañavate; asimismo, una dehesa de pan llevar, llamada el Sotillo, en la ribera del Júcar, término del Cañavate, unas casas en la aldea de Gascas, junto a la iglesia de San Antón, y un huertal palomar con una heredad de pan llevar de mil almudes y unas casas y viñas en Alarcón.

Hemos de pensar que hacia 1470 entre el marqués de Villena y el alcaide de Ves eran amistosas. Los derechos de puertos y aduanas de la ciudad de Requena, que eran propiedad de don Juan Pacheco, fueron cedidas en arrendamiento a Pedro del Castillo, que contaba como fiadores con Alonso Sánchez del Campillo, vecino de Requena, y Gonzalo Ruiz de la Almarcha, vecino de Chinchilla, para los años 1471, 1472 y 1473. El precio a pagar era de 400.000 maravedíes, que al parecer el marqués se cobró de la explotación de los molinos y propiedades de Pedro del Castillo, que aportarían unas rentas de hasta 70.000 mrs. anuales. Las condiciones bastante favorables a Pedro del Castillo no fueron respetadas por el marqués ni por su criado Hernando del Castillo, a la sazón, alcaide de Requena. Entre las condiciones pactadas en el arrendamiento se prohibía la celebración de mercados francos en Requena o que los vecinos de Utiel pagasen los derechos de puertos (1)


Diego López Pacheco negaba la mayor: la propiedad de los molinos por Pedro del Castillo, que consideraba embargados por deudas del alcaide de Ves y rematados en pública subasta a favor de él mismo y Hernando del Castillo, alcaide de Alarcón. Por contra, el alcaide de Ves, consideraba que, tras el embargo, la explotación abusiva de los molinos y heredades por Diego López Pacheco le había reportado unos ingresos de 875.000 mrs. Mientras que el marqués consideraba que Pedro del Castillo había ganado en la administración de las rentas de Requena en los años 1471 y 1472 un total de 774.000 mrs, ganancias en las que quería participar por alegar derechos de señorío sobre las rentas de esa ciudad. Pedro del Castillo conseguiría sentencia ejecutoria favorable con fecha 11 de febrero de 1485

que debemos condenar e condenamos al dicho marqués en persona de su procurador e a su procurador en su nonbre a que de día que con la dicha carta executoria fuera rrequerido fasta nuue días siguientes tornase e rrestituyese e entregase a el dicho Pedro del Castillo la posesión de la dicha mitad de los molinos e batanes e heredad e casas e viñas e dehesas de Alcañabate e Gascas en su demanda contenidas con más las rrentas que auía arrendado e rrentado de nueue años a esta parte e treynta e çinco mill mrs. por ellos en cada un año (2)

En dicha sentencia el Marqués de Villena era obligado a devolver la mitad de la hacienda del alcaide de Ves, cuyas rentas y frutos había disfrutado durante nueve años y los 35.000 mrs. que cada año habían rentado estas propiedades. Pedro de Ves reconocía una deuda impagada con el marqués de 110.000 mrs. (de los 400.000 de la deuda originaria), que se comprometía a restituir.

e porque el dicho Pedro del Castillo avya confesado dever al dicho marqués quatroçentas mill mrs. de las quales paresçió que avya pagado por su mandado dozientas e nouenta e mill mrs.  a çiertas personas, mandaron al dicho Pedro del Castillo que rresçibiese en cuenta de los dichos frutos e rrentas al dicho marqués çiento e dies mill mrs. rrestantes a conplimiento de las dichas quatroçientas mill mrs. contando en ellas las dichas dozientas e noventa mill mrs. e que en quanto a la otra meytad de los dichos molinos e casas e heredamientos e bienes que paresçían que avia seydo rrematado Ferrando del Castillo alcayde de Alarcón por quanto al dicho negoçio le tocaua e atanya mandaron dar nuestra carta executoria  (3)

También se reconocía al marqués de Villena una indemnización de 98.000 mrs. por lo obtenido en demasía por Pedro del Castillo de las rentas de Requena. Quedaba pendiente solventar las diferencias con Fernando del Castillo en quien habían sido rematada la otra mitad de bienes y hacienda del alcaide de Ves, que se negaba a devolverle los bienes embargados. A pesar de todo el conflicto seguía latente en 1485, entre el alcaide de Ves y el marqués de Villena. Aunque parece que el alcaide de Ves lograría recuperar su hacienda dos años antes de su muerte, acaecida en 1488.

No parece que existiera compromiso alguno entre los dos alcaides. Las diferencias entre Pedro del Castillo y Hernando del Castillo venían del año 1 472, cuando el primero era arrendador de los puertos y aduanas y de los derechos de descaminados y el segundo alcaide de la fortaleza de Requena. Hernando del Castillo tomó una acémila cargada de grana que llevaba Juan León a la que dio por descaminada. El valor de la carga de grana se aproximaba a cincuenta mil maravedíes; a ello se sumaba un macho de ocho mil maravedíes y cuatrocientos reales catalanes. Ese mismo año Fernando del Castillo se quedó con las ropas y joyas de oro y plata que llevaban quince moros, procedentes de Aragón, por valor de mil florines de oro; los apresó con la excusa que se dirigían a Granada y solo los libertó posteriormente con un rescate de catorce mil reales (4).

Ese año de 1472 las cosas se debieron torcer no solamente entre los alcaides Pedro del Castillo y Hernando del Castillo, también entre el alcaide de Ves y el marqués de Villena. Ese año o quizás el siguiente, Pedro del Castillo ha abandonado sus casas  en la villa de Alarcón cuando es citado para el remate de sus bienes en manos de los ahora enemigos: el alcaide de Alarcón y el marqués. Dicha salida de Alarcón, en palabras del hijo del alcaide de Ves, había sido muy deshonrosa, pues Pedro del Castillo había sido echado del pueblo y vista arrebatada su hacienda, que no volvería a recuperar hasta trece años después. Creemos que tras actitudes tan agresivas había un asunto de hondo calado: el contrabando con la grana en su paso al Reino de Aragón. Aparte del incidente referido, tenemos noticias de otros incidentes en que Juan León, un converso al servicio del Marqués de Villena, se vio implicado en el paso de esta sustancia colorante hacia el Reino de Aragón. Si Hernando del Castillo como alcaide de Requena volvía la vista para otro lado en un tráfico en el que estaba implicado su señor, Pedro del Castillo, como arrendador de puertos secos, no estaba dispuesto a dejar perder los gravámenes de mercancía de tal valor.

Pedro del Castillo esperará a la concordia de 1480, tras la derrota de Diego López Pacheco en la guerra del Marquesado, para recuperar sus bienes. El marqués de Villena invocará el espíritu de esa concordia para recuperar unos bienes dados en señorío a quien considera un criado. Hernando simplemente mantendrá una posición de fuerza y se negará a devolver la mitad de los bienes en su poder.

Las disputas económicas dieron paso a las enemistades personales. Entre los enemigos acérrimos del alcaide de Alarcón está Juan Valverde, vecino de Iniesta, que por diversos testimonios nos aparece como hermano del alcaide de Ves Pedro del Castillo (5). La enemistad entre los alcaides Hernando y Pedro venía de fecha tan lejana como 1468, cuando Hernando prendió a Juan Valverde y lo metió en una mazmorra, de donde saldría tras la intercesión del mismísimo maestre Juan Pacheco.Tras el asesinato de Juan Valverde a manos de Pedro de Cuéllar (según otros testimonios, Diego Pacheco, yerno del alcaide de Alarcón), criado de Diego, el hijo mayor de Hernando del Castillo, que a decir de sus enemigos había ordenado el asesinato. Los hijos de ambos hermanos, Pedro del Castillo y Juan Valverde tomarían partido decidido contra Hernando del Castillo en las guerras del Marquesado. Especialmente, Juan de Valverde, hijo, y Alonso de Castañeda, el hijo segundón del alcaide de Ves. Contrasta la actitud más tibia de Diego del Castillo, el hijo primogénito del alcaide de Ves. Pero los testimonios que de este Diego tenemos son de 1498, fecha muy tardía en la que sin duda había recibido la ayuda del marqués de Villena y sus criados para mantener la herencia de su padre frente a sus hermanos. Lo que sí podemos aseverar es que, durante la guerra, y seguramente antes, Pedro del Castillo había sido apartado de la alcaidía de Ves, en favor de Hernando de Chinchilla, asesinado durante el conflicto. Posiblemente, Pedro del Castillo fue apartado de la alcaidía en torno a 1473, momento en que se ve obligado a abandonar su villa de Alarcón, de donde era natural al igual que su hermano Juan Valverde.

El alcaide de Ves murió a comienzos de 1488, comenzando enseguida los litigios por su herencia. Su hijo, Alonso de Castañeda o del Castillo reclamó que su padre había determinado legar sus bienes a partes iguales entre todos los hermanos, oponiéndose a la pretensión de su hermano mayor Diego del Castillo de hacerse con toda la hacienda
mando en el dicho su testamento que Pedro del Castillo s u fijo e hermano del dicho Alonso del Castillo e todos los otros sus fijos ouiesen e heredasen su bienes e faziendas por yguales partes e que todos fuesen ygualados en la dicha fazienda e bienes con el dicho Diego del Castillo su fijo mayor que al tienpo que el dicho Pedro del Castillo fallesció tenía de su fazienda el dicho Diego del Castillo la mayor parte (6) 
La división entre los hermanos fue aprovechada por Diego López Pacheco y sus criados para revivir viejas rencillas y exigir una parte de la hacienda por deudas pasadas. Entre las criados del marqués de Villena que se sumaron a los reclamantes estaban Hernando del Castillo, alcaide de Alarcón, la mujer de Fernández de Alarcón,  el maestre Sas, alcaide del Castillo de Garcimuñoz, y Antón Granero (7)



(1) AGS, RGS, V-1480, fol. 259 Receptoría, a petición de Pedro del Castillo, alcaide de la fortaleza de Ves, para el pleito que trata con el marqués de Villena sobre la posesión de unas heredades e inmuebles, que se mencionan, en diversas localidades. Consejo 25-5-1480

(2) AGS, RGS, II-1485, fol. 294 Ejecutoria a petición de Pedro del Castillo, alcaide de Ves, de una serie de sentencias, cuyos términos se citan, dadas a su favor en el pleito que trató con el marqués de Villena, así por la posesión de ciertas heredades y molinos en la ribera del Júcar, en términos de las villas de Alarcón y Cañavate, como por ciertas rentas de Requena que habían de cobrar del maestre Juan Pacheco. Consejo Cámara 11-2-1485

(3) AGS, RGS, XI-1483, fol. 164 Receptoría del marqués de Villena, D. Diego López Pacheco, en un pleito con Pedro del Castillo, alcaide de Ves, sobre diversas heredades sitas en el término de dicha alcaidía. Consejo 15-11-1483

(4) AGS, RGS, XI-1480, fol. 162 Receptoría para presentar sus pruebas en un pleito que Pedro del Castillo, alcaide de Ves, trata con Fernando del Castillo, alcaide de Alarcón, sobre ciertas mercancías que éste, siendo alcalde de Requena, le tomó por descaminadas. Consejo 12-11-1480
AGS, RGS, IX-1480, fol. 80 Requerimiento con emplazamiento contra Fernando del Castillo, alcaide de Alarcón, para que devuelva unas acémilas que tomó a Pedro del Castillo, alcaide de Ves. Consejo 15-9-1480

(5) "Asy mismo notifico a vuestras reuerencias que tengo por enemigos a los fijos de Pedro del Castillo, alcaide que fue de Ves, defunto que Dios aya. Y a los fijos de Juan de Valverde. Todos naturales de Alarcón. Y a sus parientes. E son avidos e tenidos por tales a cabsa que Diego Pacheco, mi yerno, fue fama que fizo matar a Juan de Valverde (padre), hermano del dicho Pedro del Castillo".
Recogido por GARCIA MORATALLA, P. J.: La tierra de Alarcón en el Señorío de Villena (siglos XIII-XV, p. 207)

(6) AGS, RGS, VII-1489, fol. 157 Comisión, a petición de Alonso de Castañeda, vecino de Iniesta, sobre el reparto de la herencia de su padre Pedro del Castillo, alcaide que fue de Ves. Consejo 26-7-1489

(7) AGS, RGS, VII-1489, fol. 156 Inhibición a las justicias de la villa de Belmonte en las reclamaciones presentadas a Alonso de Castañeda y consortes, hijos de Pedro del Castillo, alcaide que fue de Ves, por los criados y vasallos del marqués don Diego López Pacheco. Consejo 29-7-1489